Talento, Marca, Propósito, Compromiso, Orgullo de Pertenencia…conceptos que oímos y utilizamos continuamente pero que no alineamos en la gestión de nuestras organizaciones.
¿Cómo puede contribuir la gestión de marca al Talento? ¿Cómo alinear el propósito de empresa con el propósito personar de mi plantilla?
En diversos estudios se constata la importancia de que los líderes empresariales apoyen el desarrollo de un propósito en sus empleados, o de lo contrario podrían enfrentar una pérdida significativa de talento. Tras el impacto de la pandemia de COVID-19, se muestra cómo la crisis llevó a muchos trabajadores a replantearse no solo su carrera, sino también el significado y valor que desean encontrar en su vida laboral.
Muchos empleados consideran que su propósito personal está ligado al trabajo, y aquellos que sienten que su empleo les ayuda a cumplir ese propósito reportan ser más productivos, resilientes y comprometidos.
Sin embargo, la realidad en muchas organizaciones es que solo un pequeño porcentaje del personal de primera línea y administrativo experimenta este sentido de propósito en su labor diaria, mientras que los ejecutivos y altos mandos sí reportan sentirse realizados. Este desfase, descrito como una «brecha jerárquica», representa un riesgo de pérdida de satisfacción y compromiso en los niveles operativos de la empresa, lo cual impacta directamente en la estabilidad y desempeño general de la organización.
Para enfrentar este desafío, es vital trabajar en tres áreas clave:
- Reforzar el propósito de la organización y alinear sus valores con las actividades diarias
- Crear espacios de reflexión donde los empleados puedan conectar su propósito personal con la misión de la compañía
- Diseñar roles que permitan a los trabajadores encontrar significado en sus tareas cotidianas.
La empresa que logre implementar estos cambios puede transformarse en un lugar más inspirador, donde los empleados no solo contribuyen a la visión corporativa, sino que también ven el impacto personal y social de su esfuerzo, lo cual beneficia tanto al individuo como a la organización en su conjunto.
(Fuente: McKinsey&Company, “Ayude a sus trabajadores a encontrar sentido de propósito – o sea testigo de cómo se van de su empresa”)
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