¿Hablamos de capacidades o de personalización? Quizás es hora de repensar cómo comunicamos lo que realmente hacemos.
¿Por qué hablamos de capacidades si queremos vender personalización?
En el mundo B2B y particularmente en el sector industrial, muchas empresas quieren vender personalización, pero terminan comunicando capacidades. Esta confusión puede ser un freno para captar clientes que realmente buscan una solución hecha a su medida, no solo un catálogo de habilidades técnicas.
Capacidades vs. Personalización: ¿Cuál es la diferencia?
Hablar de capacidades significa resaltar lo que podemos hacer: nuestro equipo, nuestra tecnología, nuestra experiencia. Son aspectos importantes, pero no son lo que realmente diferencia una oferta en mercados altamente especializados.
En cambio, vender personalización significa demostrar cómo esas capacidades pueden transformarse en soluciones únicas para cada cliente. No se trata de decir «tenemos los mejores ingenieros», sino de mostrar cómo esos ingenieros pueden desarrollar una solución específica para el reto particular de un cliente.
El error común: Hablar de nosotros en lugar del cliente
Muchas empresas caen en la trampa de hablar solo de sus capacidades:
❌ «Tenemos un departamento de ingeniería con tecnología avanzada.»
❌ «Nuestra empresa cuenta con 20 años de experiencia en el sector.»
❌ «Fabricamos equipamiento de alta precisión.»
Mientras que un enfoque de personalización debería centrarse en el cliente:
✅ «Desarrollamos equipamiento adaptados a la geometría de cada pieza de nuestros clientes.»
✅ «Creamos sistemas que optimizan la eficiencia y reducen los tiempos de preparación.»
✅ «Nuestro equipo diseña soluciones a medida para fabricantes que necesitan flexibilidad en su producción.»
Cómo comunicar mejor la personalización
Si realmente queremos vender personalización, necesitamos reformular nuestro mensaje:
1. Escuchar primero: Entender las necesidades del cliente antes de hablar de nuestras soluciones.
2. Mostrar ejemplos concretos: Casos de éxito donde la personalización hizo la diferencia.
3. Usar el lenguaje del cliente: En lugar de hablar de nuestro conocimiento técnico, hablar de los problemas que resolvemos para ellos.
4. Hablar de transformación: Explicar cómo la personalización impacta su proceso productivo y mejora sus resultados.
Conclusión
Si queremos vender personalización, debemos dejar de hablar solo de lo que podemos hacer y empezar a hablar de lo que podemos crear para cada cliente. En itziarcenoz.com, no vendemos capacidades, vendemos soluciones diseñadas a medida de las necesidades de cada cliente en cada momento.
¿Hablamos de capacidades o de personalización? Quizás es hora de repensar cómo comunicamos lo que realmente hacemos.